Un puntaje de crédito considerado “malo” es el que está, en líneas generales, por debajo de 670 en las escalas FICO Score de 300 a 850, que suelen usar los prestamistas.

El puntaje de crédito es una expresión numérica que califica la conducta de un individuo ante su crédito o deuda. En simplificación, es una herramienta que se usa para representar o interpretar la solvencia de una persona o su responsabilidad frente al crédito.

De acuerdo al puntaje e historial, cada prestamista establece sus términos y condiciones.

Además de FICO, que es el sistema de puntuación de crédito más común, también está VantageScore, que funciona en una escala ligeramente diferente. En estas escalas, en general, un puntaje de 720 y superior se considera excelente crédito. El puntaje de 690 a 719 es considerado bueno, de 630 a 689, justo y, como ya se explicó de 300 a 629, mal crédito.

Qué esperar con un puntaje de crédito malo

Si acudes a un prestamista tradicional, probablemente serás rechazado. Deberás saber dónde buscar, por fortuna, hay prestamistas especializados, conocidos como “de alto riesgo”, dispuestos a ayudar.

Debes prepararte para pagar tasas de interés más altas que alguien con un puntaje considerado bueno o excelente y probablemente, a tener menos opciones disponibles.

También es posible que debas pagar más por el seguro del automóvil, según el estado en el que vivas.

Situacional vs habitual. Tu historial de crédito también vale

Al mal crédito puede llegarse por distintos caminos y los prestamistas lo saben. Una cosa es el mal crédito habitual, que es cuando el prestatario muestra como hábitos faltar a sus pagos y administrar mal sus cuentas. El situacional es cuando un evento de la vida provoca un desbalance en tus finanzas y una caída de tu puntaje, como consecuencia.

Cuando tu mal crédito es situacional, el prestamista puede ser más considerado.

Tú puedes mejorar tu puntaje

Tu puntaje de crédito es solo una referencia, una fotografía instantánea que refleja tu situación crediticia de acuerdo a ciertos parámetros pero tu puntaje siempre está cambiando y si conoces los factores que más le afectan, puedes ir construyendo un mejor crédito día a día.

Dentro de los factores que componen el cálculo de tu puntaje de crédito, hay 2 que son los más importantes: tu historial de pagos y la utilización del crédito. Lo primero hace referencia a cuán puntual eres con el cumplimiento de tus deudas mes a mes y lo segundo es, expresado en porcentaje, cuánto de tu límite de crédito estás utilizando.

Lo clave para empezar a darle fuerza a ese puntaje y verlo crecer sería, entonces, cumplir con todas tus deudas responsablemente y no abusar de tu límite de crédito. Trata de usar menos del 30% de tus límites de crédito. Mantener este porcentaje por debajo de 30% es considerado positivo y suele sumar puntos a tu cifra.

Una mala puntuación de crédito no significa que seas una mala persona. El crédito es solo una herramienta para simplificar los procesos en este país y que, si te lo propones, puedes usar a tu favor.