El puntaje FICO es una escala de valor que resume tu comportamiento como prestatario, es una cifra de 3 números que va desde 300 a 850, siendo 300 el límite inferior de crédito, considerado “malo” y 850 el tope considerado como “excepcional”.

La ventaja de construir el puntaje más alto posible radica en que, en general, cuanto más alto sea tu puntaje, obtendrás tasas de interés más favorables, lo que hará que pedir dinero prestado sea más barato.

Tu calificación FICO se calcula a partir del procesamiento de los datos que constan en tus informes crediticios. Hay tres agencias principales que crean esos informes: Equifax, Experian y TransUnion, que tienen datos ligeramente diferentes entre sí, por lo que tu puntaje puede variar según los datos de la agencia que se usaron, es absolutamente normal.

El puntaje de establece a partir de los siguientes factores: historial de pago, que tiene un peso del 35%, utilización del monto de la deuda (30%), antigüedad de tu crédito (15%), variedad de tu crédito (10%) y cuántas consultas de crédito nuevas tengas (10%).

El puntaje FICO es un indicador del riesgo que representas para un prestamista y, aunque hay otros sistemas de calificación, suele ser el modelo más utilizado por los prestamistas.

La importancia de este sistema es que ayuda a mantener más bajo el costo del crédito para toda la población en general ya que es un sistema de reglas claras, de rápida consulta, consistente y predictivo y cuanto más accesible es la información de crédito, más prestamistas pueden prestar y más eficientes pueden ser en sus procesos para reducir los costos.

Cuando quieres obtener un préstamo para auto, el puntaje FICO es importante porque te permite predecir qué esperar de acuerdo a cómo esté tu calificación. Aunque cada prestamista establecerá sus requisitos de crédito, en general, muchos consideran que, por ejemplo, las puntuaciones superiores a 670 indican una buena solvencia.

Un buen Puntaje FICO comienza en 670. Si tu puntaje es superior a 740, generalmente puedes esperar que los prestamistas te ofrezcan tasas de interés mejores que el promedio. A medida que te acerques a la puntuación máxima de 850, es más probable que califiques para las tasas de interés más bajas y las mejores ofertas de tarjetas de crédito.

Por otro lado, una puntuación de 570 a 669 se considera aceptable, mientras que de 300 a 569 se considera deficiente. Todavía puedes calificar pero es posible que debas pagar tasas de interés más altas, hacer un pago inicial más grande o pagar tarifas adicionales.