Cuando tienes mal crédito, sabes que pagarás un poco más por concepto de intereses y quizá la única solución que vislumbres en puerta es elegir un auto muy barato. Sin embargo, la búsqueda debería apuntar, mejor, a encontrar algo asequible pero también confiable y hay estrategias para lograrlo.

Para conseguir un automóvil que sea económico y que no se desmorone en seis meses, es importante saber a quién acudir.

Hay que saber hacer la búsqueda

Primero, toma el control de tu crédito, conoce tu solvencia. Consulta cuál es tu puntaje e investiga las tasas de interés promedio para un préstamo para automóvil con mal crédito. Sin este conocimiento, no tienes el poder de negociar los costos con un prestamista o distribuidor.

Online versus offline

A la venta tradicional de autos, le salió un gran competidor: la Internet.

La venta de autos por Internet, en general, se centra en vender un mayor volumen de automóviles en lugar de concentrarse en obtener el máximo beneficio en cada venta individual. Por lo tanto, la cotización del precio inicial de un gerente de ventas por Internet suele estar muy cerca del precio de venta más bajo de ciertos vehículos.

Es difícil cuantificar con precisión los ahorros que puedes obtener utilizando el departamento de Internet de un concesionario de automóviles pero es seguro decir que el precio casi siempre será más bajo que el precio que te cotizarán si entras directamente a un concesionario.

En Internet, además, ahorras tiempo y estrés. Cuando compras en persona en un concesionario, corres el riesgo de tomar decisiones costosas e improvisadas sobre financiamiento o productos adicionales. Trabajar a través del departamento de Internet minimiza eso. También es bueno si no tienes ganas de negociar.

Cómo comprar un auto estratégicamente

Cómo encontrar autos baratos

Las siguientes acciones pueden ayudar un montón a ahorrar dinero en tu próxima compra de auto.

Opta por un vehículo usado en buenas condiciones. Idealmente, apunta a un auto que ya haya pasado su punto de depreciación máxima. Esto significa buscar autos que tengan entre dos y cinco años, en la mayoría de los casos. Ten en cuenta que los vehículos más nuevos a menudo califican para una tasa de interés más baja pero, por lo general, tienen un precio de venta más alto.

Si necesariamente apuntas a un auto nuevo, busca reembolsos, ofertas e incentivos. Los concesionarios suelen lanzar estas ofertas en ciertas temporadas o feriados y puedes ahorrar algo de dinero ahí también.

Elige la versión básica. Los autos básicos tienen precios básicos. Evita el paquete de equipamiento superior como sistemas de infoentretenimiento o asientos especiales. Apégate mejor a la funcionalidad del vehículo por el bien de tu presupuesto.

¿Vale la pena comprar un auto en una venta privada?

Comprar un auto a una parte privada y no a través de un concesionario conlleva sus ventajas, la principal es que el precio suele ser más barato. Pagar en efectivo evita también lidiar con el papeleo financiero o los pagos mensuales.

Y aunque, como prestatario con mal crédito, puede ser una opción atractiva, ya que obtienes un auto con el dinero que tengas y te evitas el pago de intereses, un auto muy barato puede que no sea muy confiable o duradero. Puede ser mejor opción tomar ese dinero como pago inicial de algo más seguro.

En una venta privada, tienes que encargarte personalmente del traspaso de propiedad y todo el papeleo, así como de la inspección del auto. Si no eres experto automotriz o si el vendedor no es de tu confianza, quizás tendrás que llevarlo con un mecánico para una evaluación, por razones de seguridad.

Además pierdes la oportunidad de mejorar tu crédito a través de un préstamo. Un préstamo para auto, si cumples fielmente con los pagos, te permite, con el tiempo ir mejorando tu crédito, y con ello accedes a futuro a mejores términos y condiciones.

El mundo del financiamiento para autos es amplísimo y hay una solución para cada necesidad y cada tipo de prestatario. Solo hay que saber dónde buscar.